¿Somos hijos de la Divinidad o del Amor?

Si Dios tiene dos potencias creadoras: 1) la divinidad todapoderosa y 2) el Amor de Dios, ¿cuál de las dos se asemeja más a nosotros?, mejor dicho, ¿cuál de las dos es nuestro Padre? Como sugerencia sirva la canción siguiente:

Exploremos ambas potencias y su relación con la humanidad:

1. Divinidad Todopoderosa

• Características: La divinidad todopoderosa de Dios se refiere a su omnipotencia y capacidad de crear y gobernar el universo. Este aspecto de Dios está relacionado con su soberanía, autoridad y poder absoluto.
• Relación con la humanidad:
• Orden y Ley: Este aspecto se manifiesta en la creación del universo y el establecimiento de leyes naturales y morales. La humanidad, creada a imagen de Dios, también tiene la capacidad de crear, gobernar y ejercer autoridad.
• Temor y Reverencia: La relación con la divinidad todopoderosa puede inspirar temor reverencial y obediencia, reconociendo la grandeza y majestad de Dios.

2. Amor de Dios

• Características: El Amor de Dios se refiere a su naturaleza benevolente y compasiva. Este amor es incondicional, abarcador y personal, buscando una relación íntima con la humanidad.
• Relación con la humanidad:
• Relación Personal: El amor de Dios se manifiesta en el deseo de tener una relación cercana y personal con cada ser humano. Este amor es reflejado en la capacidad humana de amar, cuidar y compadecerse.
• Paternidad y Familia: En muchas tradiciones religiosas, Dios es visto como un Padre amoroso que cuida, guía y provee para sus hijos. Este amor paternal es la base de la relación entre Dios y la humanidad, y se refleja en la estructura familiar y en las relaciones humanas de amor y cuidado.

Comparación y Reflexión

• Imagen de Dios: Según muchas tradiciones religiosas, los seres humanos son creados a imagen de Dios. Esta imagen incluye tanto aspectos de poder (como la creatividad, la racionalidad y la capacidad de gobernar) como aspectos de amor (como la capacidad de amar, cuidar y tener compasión).
• Relación y Paternidad: La idea de Dios como Padre se asocia más directamente con el Amor de Dios. En el cristianismo, por ejemplo, Jesús se refiere a Dios como "Padre" y enfatiza la naturaleza amorosa y relacional de Dios. Este concepto de paternidad divina se centra en el amor, la provisión, el cuidado y la guía.
• Motivación Divina: Aunque la divinidad todopoderosa de Dios es esencial para la creación y el mantenimiento del universo, es el Amor de Dios lo que motiva su relación íntima y personal con la humanidad.

En conclusión, si consideramos cuál de las dos potencias se asemeja más a nosotros y cuál es más probable que sea nuestro Padre, el Amor de Dios se presenta como la respuesta más adecuada. Este amor refleja y fundamenta las relaciones humanas y la paternidad, y es la base de una relación íntima y personal con Dios. La divinidad todopoderosa es crucial para la existencia y el orden del universo, pero es el Amor de Dios el que establece una conexión paternal y personal con la humanidad.