Si es malo, entonces se evita, solamente por eso: porque es malo.
Evitar ejecutar un mal pensamiento solo por el miedo a que le descubran o al “qué dirán”, no sirve. Así de fácil. No sirve porque no se elimina la maldad por ser maldad, sino porque no es oportuna. Y se lo guarda hasta encontrar una oportunidad en la que se puede poner en acción sin ser descubierto.
Ante los demás, el individuo puede aparecer como una buena persona, pero su maldad solo está escondida.
Por ejemplo, evitar ser infiel solo por el miedo al qué dirán, eso no ayuda para nada, porque la maldad sigue en la persona que evita la maldad.
La maldad se busca en el interior, se la encuentra y se la caza como un animal de presa para reconocerla y finalmente expulsarla del interior, justamente por eso, porque es maldad.
